Un paso para adelante, tres para atrás...

"Aunq sabiendo q despues de la noche, siempre llegará el día...odio las variables. Cuando casi estoy x cruzar la meta, siempre vuelvo al punto de partida...Cuando me queda poco para terminar el juego y ser la ganadora, lanzo el dado y caigo justo en el casillero q me indica q debo volver a empezar...y otra vez empiezo de cero."

Todos en algún momento debemos enfrentarnos a situaciones q no esperamos, momentos q no estaban en nuestros planes o simplemente cosas q nos desbordan y, algunas veces, hasta logran causarnos un colapso total y absoluto.
Cuando logramos encontrar el origen de nuestro descontrol e intentamos buscar la forma de q todo vuelva a ordenarse, lo mas difícil no es hallar soluciones, sino ejecutarlas...Para q se entienda mejor, lo mas complicado es vivir el día a día, enfrentar nuestros temores a diario, combatir nuestros fantasmas como si formaran parte de nuestra rutina cotidiana, en fin, volvernos tan inmunes a lo q nos dañó como sea posible.
Pero si bien la teoría es clara, en la práctica no es tan sencillo. Es una tarea ardua y sumamente difícil, el intentar ser invulnerables a lo q, impiadosamente, nos llevó al fondo del mar.
Siempre sostuve q el corazón y la mente deben ser totalmente independientes y nunca deberían interponer todo su poder al mismo tiempo, pero como en la lucha de poderes no hay excepciones, a veces la mente se niega a descansar y los sentimientos, pretendiendo no perder el terreno conquistado, se niegan a ser cautelosos...y ahí es cuando perdemos el control.
Y en la confusión, dando manotazos de ahogado, mas nos hundimos, mas naufragamos...y, a veces, nos parece ver alguna luz en la mitad del Océano, y gritamos pidiendo ayuda, pero esa luz desaparece al escuchar nuestra voz...parecería q nos ignora, quizá temiendo q, al no poder ayudarnos, termine indefectiblemente en el fondo del mar junto a nosotros...